Sombrillas de papel washi

Noten- gasa

de los jardines del Shoukado. Ciudad de Yawata, Kyoto

Generalmente de color rojo. Se la puede ver con frecuencia frente a las casas donde se ofrecen té o dulces japoneses. Dentro de la casa hay mesas y asientos donde sentarse a tomar té pero los que prefieren hacerlo afuera se sientan debajo de la sombrilla en el banco/mesa (foto) con mantel también rojo que sirve de asiento y para apoyar el pocillo y el platito con los dulces.

A pesar de que la materia prima es la misma a la del té occidental, la infusión del té japonés es de color verde y se la toma sin azúcar.

Varillas de bambú, papel washi, piezas de madera y de metal son los materiales más importantes empleados en la fabricación de sombrillas japonesas.

Con piezas de madera y varillas de bambú el artesano compone primero el esqueleto de la sombrilla que por supuesto se debe abrir y cerrar con facilidad.

Una vez que se tenga el esqueleto, se procede a pegar sobre el mismo, el papel washi seccionado aproximadamente en diez cortes. Se utiliza para pegar cola fabricada con almidón de mandioca. Se la deja secar y se marcan cuidadosamente los pliegues en el papel washi para su perfecto plegado.

Si se desea sombrillas con algún diseño se pinta con "Ganryo" (tintas naturales al agua utilizadas en la técnica de la pintura japonesa), se barniza con laca las varillas y el eje central. Para impermeabilizar el papel washi se aplica aceite de lino y se la deja secar cerca de dos semanas al aire libre.

Por último se realizan los arreglos internos con hilos de hermosos colores.

Espero mas adelante poder dedicar otra entrada sobre la historia de la sombrilla japonesa.

Su origen, su evolución a través de los tiempos, hasta adquirir la forma actual me parecen también muy interesantes.